Mi experiencia crucial ha sido el trabajo de Walker Evans. Desde mi punto de vista, la imagen interior de Farmer´s kitchen, Hale County, Alabama (1936) muestra una habitación perfectamente iluminada, pero si se mira con más detenimiento se observa que la toalla está colgando de un simple clavo, y que es una pobre casa rural hecha de tablones. Es entonces cuando la pobreza se hace evidente. Otra imagen es el retrato perfecto de una familia en su hogar. Todos los miembros muestran rostros demacrados y sólo el más joven está sonriendo. El niño no comprende la miseria en la que ha nacido y de la que nunca escapará. Walker Evans, al igual que otros artistas, recibió de la Farm Security Administration de los EE UU el encargo de documentar las condiciones de vida desastrosas del medio Oeste durante la Gran Depresión. Con ello, las personas deberían motivarse para no aceptar dichas condiciones de vida inhumanas. La famosa historia de Las uvas de la furia, escrita por John Steinbeck, en 1939, fue llevada al cine de la mano de John Ford, un año después de estas políticas. Es muy interesante ver cómo William Christenberry, que había sido amigo de W. Evans, visitó los mismos sitios y los documentó, esta vez en color. Es aterrador ver cómo su obra actual muestra la misma calamidad, ya que no ha cambiado mucho.
Desde el momento que comprendí la complejidad de las fotografías de Walker Evans, admiro su crítica sutil del agravio social.
Walker Evans pertenece a los representantes del nuevo Realismo en EE UU. Ya me había impresionado poco antes otro de sus integrantes, Ansel Adams. Reconocido como el fotógrafo de paisajes más famoso de EE UU, desarrolló el Zone System a principios de la década de los cuarenta del siglo pasado. Su técnica está diseñada para contribuir a hacer real la fotografía planeada con antelación en la mente mediante la exposición precisa (Fred Archer fue otro de los inventores del Zone System). Me fascinó mi incursión en el Zone System por la increíble calidad técnica que puedo alcanzar ahora y que ha repercutido en mi obra. Comencé a respetar las cosas simples en mis fotografías.
El siguiente impulso lo obtuve de los poetas del Realismo Mágico, que fueron los representantes de esta tendencia en el ámbito del arte latinoamericano. El primero fue Miguel Ángel Asturias. En su obra Hombres de Maíz (1949), conectó la realidad visible con los mitos de los indios maya de Centroamérica de tal manera que creó una nueva realidad. El premio Nobel, Gabriel García Márquez, el principal, cuenta con la mejor reputación a la hora de plasmarlo en español. Aunque para mí fue Carlos Fuentes quien me dio un nuevo impulso decisivo a través de su narración Chac-Mool (el dios de la lluvia de los mayas). Cuando leí las últimas palabras de Chac-Mool comprendí de una manera mágica que lo invisible y enigmático eran una realidad que debía aceptar.
En mi página Web hay muchas fotografías del sur de España. El motivo que me hizo volver la mirada hacia Andalucía fue la novela histórica La sombra del granado (1992) de Tariq Ali, donde describe el declive de Al-Andalus que causó la movilización del mundo islámico para hacerse cargo de Andalucía. Granada, el último reducto musulmán en España, fue conquistada por los Reyes Católicos (Fernando de Aragón e Isabel de Castilla) en 1492. Esta coexistencia única y relativamente pacífica entre musulmanes, judíos y cristianos llegó a su fin tras el progresivo desarrollo del radicalismo de todas las partes.
La fotografía enmarcada en la parte derecha muestra un balcón del Albaycín, el antiguo centro árabe de Granada. Al principio puede impresionar la interferencia atmosférica de la luz y las sombras, pero hay más. Un balcón al descubierto, las rejas dentro de un espacio angosto. ¿Qué es lo que ocultan las rejas y sus sombras que parecen formar un todo? La respuesta está en el origen árabe de esta antigua metrópolis. Refleja el principio de ver pero no ser visto, el harem. Muestra de una manera mágica que el pasado árabe sigue estando presente en Al-Andalus.
Ansel Adams me hizo descubrir el potencial de la perfección técnica y el respeto por las cosas simples. Walker Evans me enseñó a buscar la expresión en múltiples niveles y los autores del Realismo Mágico a conectar lo visible con la realidad oculta.
P.S.: La biografía relativa a estos temas se encuentra en "Enlaces y Biografía"
© Thomas Weber 2010 - 2024